LAS RELACIONES EN UNA VIDA PLENA

Como hemos venido trabajando a través de los videos y artículos anteriores, una VIDA PLENA se puede construir subiendo el nivel de satisfacción en 4 dimensiones de nuestra vida:

1. Paz interior

2. Relaciones

3. Salud

4. Abundancia

En esta oportunidad nos centraremos en el tema de las relaciones.

La primera relación que tenemos es con nosotros mismos; en ese sentido, si queremos impactar positivamente el relacionamiento que estamos teniendo con otros, lo más sincero es empezar a revisar la forma en que me estoy tratando a mí mismo. Podemos iniciar reflexionando sobre las siguientes preguntas:

¿Cómo es el diálogo interno que tengo conmigo?

¿Qué tono de voz uso conmigo mismo cuando estoy en momentos difíciles?

¿Cuando me miro en el espejo, qué me digo?

¿Qué valoro de mí?

¿Cuáles aspectos de mí no estoy aceptando?


Estas respuestas nos darán una muestra de cómo está la relación conmigo y cómo y cuánto debo desarrollar estos 2 elementos que eleven el nivel de satisfacción en ésta:

  • Afectividad
  • Efectividad

La afectividad en las relaciones se presenta como la oportunidad de permitirnos expresar una facultad humana que marca la diferencia: la amabilidad. Esta, cuando se expresa,  genera confianza, empatía, comprensión, tranquilidad y respeto. La amabilidad es el camino más directo para la cercanía en una relación. Todos la tenemos y se trabaja afianzando los siguientes aspectos:

  • Amor propio
  • Amor a otros
  • Receptividad a recibir el amor de los otros

Así mismo, la afectividad se complementa con la efectividad; nos relacionamos para generar resultados, para alcanzar algo juntos, para compartir experiencias y que estas tengan un efecto. Muchas veces cuando nos relacionamos, tanto con nosotros mismos como con los demás, perdemos de vista la efectividad de las relaciones y tenemos comportamientos que no apuntan a la efectividad de las mismas. Algunos ejemplos de pérdida de efectividad en una relación son:

  • Juzgar al otro
  • Rechazar comportamientos o creencias de los otros
  • No escuchar las opiniones y sentires de los otros
  • No tener conversaciones sobre los problemas o conflictos

Inconscientemente generamos comportamientos que van en contravía de la efectividad, del propósito por el cual construimos la relación. Es por esto que una forma concreta de poder verificar si estoy siento eficiente en mis relaciones, es preguntarnos constantemente: ¿esto que voy a hacer o que estamos haciendo aporta al propósito de esta relación? Si la respuesta es no, es recomendable tomar distancia, respirar conscientemente y regresar con amabilidad con una nueva acción que le aporte a la efectividad de la relación.

Afectividad + Efectividad = Relaciones Armónicas.


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